Idiomas: español > francés | Ámbito: cultura |
Tipo de documento: noticia | Volumen: 894 palabras |
En los convulsionados días que vive Chile en medio de protestas, incendios y saqueos, las redes sociales han jugado un rol muy activo en cuanto a la información de lo que está sucediendo en el momento y que los medios tradicionales no alcanzan a cubrir de forma inmediata. Sin embargo, muchas veces su aporte también ha sido un factor que genera traspiés en el avance hacia una solución definitiva del conflicto, al caer en el utilitarismo ideológico y su consecuente subjetividad que incluso ha derivado en desinformación. Los “tiempos mejores”, frase que acuñó como slogan el presidente Sebastián Piñera durante su campaña presidencial y que lo llevó por segunda vez al Palacio de La Moneda, han estado lejos de cumplirse en el territorio que los mismos chilenos autodenominan para sí; la larga y angosta faja de tierra. Desde que comenzó su segundo periodo en la presidencia del país (el primero de 2010 a 2014), se avizoraba un panorama complicado para su mandato, una atmósfera densa y una incertidumbre sobre cómo podría frenar un eventual escenario adverso respecto a la imagen que tiene de él una gran parte de la ciudadanía, que lo ve como un ícono de la derecha chilena aliada a la dictadura de Pinochet, la que ejerció el poder por 17 años. | A milieu de la tourmente que connaît actuellement le Chili avec les manifestations, les incendies criminels et les pillages, les réseaux sociaux ont joué un rôle important en fournissant des informations actualisées sur des événements que les médias traditionnels ne peuvent pas facilement couvrir. Cependant, l’information transmise par ces mêmes réseaux s’est avérée être un obstacle à la progression vers une solution définitive du conflit, car les usagers [des réseaux sociaux] tombent dans un utilitarisme idéologique, et la subjectivité qui en résulte s’est transformée en désinformation. Les « temps meilleurs », un slogan adopté par le président Sebastián Piñera pendant sa campagne présidentielle qui l’a mené pour une deuxième fois au Palais de la Moneda, ont été loin de se réaliser sur la longue et étroite bande de territoire que les Chiliens connaissent comme leur pays. Depuis que M. Piñera a entamé son second mandat présidentiel (le premier était de 2010 à 2014), les perspectives de sa présidence semblent compliquées ; il y a un climat de pessimisme et une incertitude sur la possibilité de freiner un éventuel scénario négatif face à l’image que la population a de lui, celle d’une icône de la droite chilienne alliée à la dictature de Pinochet qui a exercé le pouvoir pendant 17 ans. |
Leer el artículo entero publicado el 06/11/2019 en español o en francés